Nadie duda ya de que la educación vial es una parte importantísima en la formación de nuestros jóvenes y que, aunque de manera transversal, ha de reforzarse en la medida de lo posible. A diario nos enfrentamos con el desafío de interactuar con coches, peatones, motocicletas, ciclomotores, patinetes y otros peatones que ponen a prueba nuestra forma de movernos, y a veces, nuestra paciencia. Por eso, como actividad complementaria, nuestro Plan de Centro incluye una visita de nuestro alumnado de cuarto curso a las dependencias que la Dirección General de Tráfico tiene habilitadas a tal efecto: la concienciación sobre la importancia de una buena educación vial que haga de nuestros alumnos mejores ciudadanos.
